
El sector de la hostelería incluye toda una serie de tareas y profesiones en los que se debe de tratar todo tipo de productos. La limpieza se considera un factor clave que nunca se ha de descuidar: de esta manera, el cliente podrá estar seguro de que ese plato que se va a comer no le va a intoxicar, además de que el local contará con un aspecto mucho más estético, invitando a que el cliente pueda volver a repetir.
En la restauración hay muchos departamentos y en cada uno de ellos la limpieza es clave: desde la atención al cliente, la manipulación de los alimentos o de bebidas, el control de los mismos, almacenamiento, cocina y cámaras, instalaciones y servicios, etc, se deben de utilizar productos de limpieza para restauración, con el objetivo de conseguir una buena desinfección, pero al mismo tiempo evitando productos muy agresivos que puedan afectar a la salud de los clientes, del mismo modo que ocurre con los jabones para hoteles.
También hay que considerar la gran cantidad de electrodomésticos y accesorios de cocina que se usan para hacer los platos: desde planchas, sartenes, picadoras de carne, bandejas, tenedores, cuchillos y cucharas, cacerolas, elementos textiles que ayudarán a presentar mejor los platos (cómo manteles o servilletas) hasta útiles de limpieza como fregonas, cubos o escobas.
En todos y cada uno de estos accesorios, se debe de elegir una solución de limpieza correcta. De lo contrario, el establecimiento puede recibir una visita de Sanidad y peligrar su apertura.
¿Qué ofrecemos?
Ahora que ya conoces la importancia de contar con una correcta higiene en la restauración, te ofrecemos productos que todos tus clientes van apreciar: tenemos desde desengrasantes concentrados (incluso para planchas), lavavajillas manuales, geles de manos, limpiadores multiusos, ambientadores antigoteo, fregasuelos, y mucho más.
Independientemente de la zona que quieras tratar, en esta sección siempre podrás encontrar un producto adecuado.
Un problema, desgraciadamente bastante habitual, a la hora de elegir un producto de limpieza de restauración, es no saber si, por ejemplo, es compatible con el suelo. Los que tienen un pH alcalino suelen ser más respetuosos con el entorno, por lo que suponen una buena solución tanto para los suelos, las paredes, diferentes utensilios, mesas de trabajo, diferentes equipos y mucho más; mientras que los que tienen un pH ácido están más bien pensados para tratar de una forma más agresiva la suciedad.
Además de todo lo anterior, si todavía te queda alguna duda sobre estos productos, te ofrecemos una atención personalizada para ayudarte a solucionarla.
Confía en nuestra empresa de soluciones de limpieza y notarás la diferencia.